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Trabajo de Grado

Colombia es uno de los países suramericanos con más alta tasa de natalidad y a menor edad en donde cada vez más se busca hacer concientisar a las mujeres sobre los métodos de planificación, gracias a estas campañas las pacientes que se someten a la ligadura de trompas o Pomeroy se ha incrementado notablemente.

Los temores mal fundados, por tabú, de manejo popular y los específicos a que significa someterse a cualquier procedimiento quirúrgico, es decir la anestesia, el dolor postoperatorio y el nivel estético que influye notablemente en la aceptación y recuperación del paciente de cirugía han logrado que esta técnica de planificación se viera limitada, sin embargo gracias a la técnica que se pretende describir en este trabajo muchos de los temores de las pacientes se ven notablemente diezmados ya que la incisión es una mini laparotomía transversa además la manipulación que se realiza por medio de un instrumento modificado especialmente para esta técnica, que minimiza el dolor y la molestia postoperatoria. A si mismo los costos y el tiempo quirúrgico se reducen considerablemente logrando de esta manera que la micro laparotomía sea una nueva y mejor opción para las pacientes como para los especialistas.
La inquietud por mejorar la técnica convencional nace de la necesidad por parte de pacientes y cirujanos de encontrar un lugar común donde la intervención, sus riesgos y exigencias, sean tan poco considerables que no impidan la fácil captación, motivación, y sobre todo resolución de sus necesidades de planificación familiar.

El área de trabajo escogida – el municipio de San José del Guaviare y sus áreas rurales aledañas - tiene serias limitaciones en su cobertura de planificación familiar debido esencialmente a limitaciones sociales, políticas y geográficas. El número de personas en edades fértiles y embarazadas es desconocido pues la población es flotante y los censos no se aplican de manera juiciosa. Las vías de acceso son precarias y algunas de ellas tienen serias restricciones de movilización debidas a la situación de orden público.

La captación de pacientes para aplicación de políticas de planificación familiar es particularmente baja, ello no solamente por los obstáculos ya mencionados sino por las barreras culturales relacionadas con estas prácticas, todas ellas basadas en mitos y creencias populares.

La ligadura de trompas ha permitido ampliar de manera saludable la cobertura de planificación en los países en vías de desarrollo durante las últimas cuatro décadas, permitiendo una cobertura aceptable con un método definitivo, de bajo costo, fácil de masificar y de resolver aún en niveles bajos de complejidad. (en varios países de América latina, se entrenan equipos de médicos generales para que lleven a cabo técnicas con anestesia local en sus regiones de influencia).

En nuestra región surgió la inquietud de lograr una nueva técnica de abordaje que lograse conciliar lo mejor de las técnicas disponibles, el bajo costo de las técnicas abiertas que por otra parte gozan de menor aceptación por el mayor dolor postoperatorio y el tamaño de la cicatriz, la baja invasividad de las técnicas endoscópicas que tienen la limitación de los altos costos institucionales que generan, la rapidez de las técnicas mejoradas gracias al diseño de materiales ergonómicos adecuados para la manipulación del tejido.

La respuesta por parte de las pacientes en términos de motivación, adhesión a los programas y resultados mensurables (duración del procedimiento, costos directos, dolor postoperatorio, complicaciones, etc.) fue el motivo por el cual emprendimos este estudio y los resultados de dicha experiencia son el contenido de esta presentación.